IGLESIA DE SANTA MARINA

Alto Nervión

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Arakaldo | Bº Elixalde

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Resumen (PDF)

Bº Elixalde s/n (48498)

p.santamarina.arakaldo@bizkeliza.org

Parroquia de una modesta anteiglesia, la de Santa Marina ocupa un lugar excéntrico con respecto al reducido núcleo del pueblo, situación ésta bastante frecuente en los municipios rurales vizcaínos.

Se asienta el templo en el borde de un rellano en la parte baja de la ladera del monte Unzueta. Resulta así visible desde todo el entorno, destacando su característica silueta definida por su singular campanario.

EDIFICIO [1]

La planta [2] del tempo se ordena en cuatro tramos oblongos iguales que conforman una prolongada nave [3] [4], a la que se añade una cabecera de iguales dimensiones que los tramos y que se individualiza por unas pilastras y un par de gradas.

El aparejo [5] es mampostería irregular con uso abundante de canto de río. Los sillares, calizos, aparecen sólo en esquinas, contrafuertes y recerco de vanos.

Hacia el norte (incluida la izquierda de la fachada de los pies) presenta un zócalo [6] de escasa salida, quizás destinado a reforzar el edificio en aquella zona, donde el terreno cae en pendiente.

Las paredes acusan al exterior dos adelgazamientos sucesivos [7], con algunas irregularidades en altura, que no parecen responder a fases en la construcción del edificio sino quizás a una menor necesidad de muro portante al ir ganando altura.

Al interior la fábrica aparece enlucida, salvo en su parte baja, donde el mampuesto aparece visto, a modo de zócalo. Una hornacina adintelada [8], hoy ocupada por una imagen, perfora la pared norte.

El pavimento es en madera.

El soporte básico del templo son sus propios muros de carga. Los fajones que marcan los tramos apean en ménsulas toscanas recortadas en semicírculo [9]. Sólo el arco que define el ábside aparenta descansar en unas pilastras [10] que en realidad parecen ser de escayola, sin función sustentante. En los rincones las repisas son en ángulo, recortadas en recto las de la cabecera [11] y curvilíneas las de los pies [12].

Al exterior hay un sistema de contrafuertes [13] de mampuesto reforzado con sillares calizos, repitiendo los escalonamientos del propio muro con otro más abajo, a modo de zócalo.

Estos machones no se disponen de manera del todo lógica [2]. Hay unos sólidos estribos diagonales en los ángulos, excesivos para las actuales bóvedas, y los de las caras laterales, que están ligeramente desparejados entre sí, no coinciden del todo con los fajones, además de que faltan entre la cabecera y el primer tramo y entre el segundo y el tercero. Da la sensación de que en algún momento se pensó en dotar al templo de una techumbre más ambiciosa, quizás de crucería, que nunca llegó a materializarse1BARRIO LOZA, 1989-1991, vol. I, p. 377..

Las bóvedas [14] son de lunetos. Hoy están pintadas, pero en algunos puntos donde la pintura se ha cuarteado se aprecia que hay una policromía anterior que parece recrear nervaduras.

El tejado [15] es a cuatro aguas, con larga cumbrera longitudinal.

Las ventanas [16] son más escasas de lo habitual. Se abren en la cabecera y el primer tramo por el lado de mediodía, y hay otra también a los pies, centrada. Son vanos adintelados, con las aristas achaflanadas al exterior mientras que hacia dentro [17] son con derrame –sobre todo en el alféizar– y cañón escarzano. Se cierran con rejas de nudo y doble pera [18].

Los accesos son los dos habituales al sur y oeste. El primero [19] es en medio punto, de dovelas de moderada salida salvo la basal de cada lado, de menor radio pero mayor altura. Descansa la rosca en unas impostas de placa muy cortas. Al interior [20] es en leve derrame y con cañón ligeramente escarzano, aunque éste parece un recrecimiento. Da la sensación de que en algún momento el arco fue peraltado, cambiando sus primeras dovelas por otras más altas y cortas y añadiendo las impostas, lo que obligó a recrecer el túnel.

Al exterior cuenta con una aguabenditera [21] de pila de sección cuadrangular, gallonada y con el reborde listelado-abocelado. Encima hay placa para un esquemático Gólgota y sobre ella la huella de un arrancado medallón de la Cruz de la Indulgencia –aún queda algún resto–.

El portal de los pies [22], más amplio, es de dintel adovelado con el cañón igualmente en derrame, muy marcado en el arco superior escarzano [23]. En su jamba se excava una sencilla aguabenditera [24] con una cruz toscamente grabada.

El coro [25], de madera, afecta a todo el tramo final de la iglesia. La viga que lo soporta descansa en sendos modillones pétreos de cuarto de bocel [26]. Los balaustres son torneados. Se sube por escalera de madera de dos tramos.

La sacristía [27] se adosa a la cabecera y el primer tramo por el lado del evangelio. Se cubre con techo de bovedillas entre solivos. El acceso [28] es una puerta adintelada desde el tramo, pero tuvo otra similar al presbiterio, hoy cegada y convertida en un armario. La luz penetra por dos ventanas al norte, recientes –por su ubicación quizás modificación de otras anteriores–, aunque hubo una al este similar a las del templo, hoy ampliada para dar acceso a un servicio.

La torre [29] –más bien campanario– es un elemento extraño, el más identificativo del templo. Se trata de un habitáculo asentado en equilibrio sobre el hastial de los pies, soportado por tornapuntas que al exterior ajustan en el rebaje superior del muro y al interior se embuten encima del coro, traspasando la bóveda. Hoy su estructura de postes y jabalcones se rellena de ladrillo moderno, pero antes fue de mampostería.

El pórtico [30] cierra la parte de los pies, donde se abre un paso central, y el flanco de mediodía hasta algo más de la mitad del templo. Es una solución muy rústica de tejavana que contra el muro apea en un escalonamiento y en ménsulas con ayuda de algunos jabalcones, y al exterior va sobre postes auxiliados con nuevas tornapuntas. Calzan esos postes en el consabido pretil con banco corrido, banco que se repite en parte contra la pared del templo.

Se encacha [31] dibujando círculos con hexafolias inscritas.

Cuenta Iturriza que la iglesia de Arakaldo fue fundada “hacia el año 1522” por sus feligreses, desmembrándose así de su matriz de Arrankudiaga, “por causa de la lejanía considerable”. La fundación se realizaría a partir de una preexistente ermita (“eremitorio antiguo”) dedicada a Santa Marina2ITURRIZA y ZABALA, vol I, p. 388..

Pero de aquel templo renacentista no queda nada más que el acceso sur y alterado, ya que al renovarse el templo parece haber sido peraltado. Como veremos hay también algún elemento mueble que corresponderá a esos primeros años del XVI: la Piedad, la pila bautismal y el remate del aguamanil de la sacristía.

La iglesia actual es un muy sencillo y homogéneo edificio barroco desornamentado, propio del siglo XVIII. Según Ybarra las obras se iniciaron un 2 de julio de 1727 y acabaron el 28 de noviembre de 1728, fecha final que Iturriza retrasa a 1730, todas ellas adecuadas a las características del edificio3YBARRA y BERGÉ, 1958, p. 212. ITURRIZA y ZABALA, vol I, p. 388..

Después de eso pocas intervenciones importantes parece haber conocido el templo. Quizás lo más destacable sería la renovación del coro, a fines del XIX a juzgar por los varales.

1. BARRIO LOZA, 1989-1991, vol. I, p. 377

BARRIO LOZA, José Ángel (dir.). Bizkaia. Arqueología, urbanismo y arquitectura histórica. Bilbao: Universidad de Deusto – Deiker / Diptación Foral de Bizkaia – Urbanismo y Medio Ambiente, 1989-1991, 3 vols.

2. ITURRIZA y ZABALA, vol I, p. 388.

ITURRIZA y ZABALA, Juan Ramón de. Historia general de Vizcaya y epítome de Las Encartaciones. Ed. de Ángel Rodríguez Herrero. Bilbao: Librería Arturo, 1967, 2 vols.

3. YBARRA y BERGÉ, 1958, p. 212.

YBARRA y BERGÉ, Javier de. Catálogo de monumentos de Vizcaya. Bilbao, Junta de Cultura de Vizcaya, 1958, 2 vols.

ITURRIZA y ZABALA, vol I, p. 388.

ITURRIZA y ZABALA, Juan Ramón de. Historia general de Vizcaya y epítome de Las Encartaciones.

MOBILIARIO

Hubo en Arakaldo un retablo romanista, de fines del siglo XVI, del que sólo se ha conservado lo que hoy es el zócalo del retablo actual.

Y sabemos que durante la Guerra de Independencia los franceses destruyeron un retablo de Santa Ana, que sería repuesto en 1817. Probablemente se perderían otros elementos cuando en 1834, durante la Primera Guerra Carlista, las tropas reales saquearon el templo –incendiando además el pueblo–4AHEB-BEHA, Cuentas de fábrica de la parroquia de Santa Marina de Arakaldo. 1808-1829, sign. 0135/006-00. ELORRIAGA BUSTAMANTE, 1995, p. 344..

Por otra parte, según el testimonio de actuales feligreses, hasta la recepción del Concilio Vaticano II hacia 1970 había al menos un retablo dedicado a San Juan, así como una cancela definiendo el presbiterio, una reja en torno a la pila bautismal (entonces a los pies del templo) y un púlpito.

Pese a estas pérdidas, aún atesora el templo un patrimonio mueble de interés.

Retablística

 

El único retablo [32] conservado es un pequeño mueble en madera policromada, de zócalo, banco y cuerpo en tres calles y arriba ático. Va marmorizado en gris y con la decoración dorada.

El zócalo, muy alterado, conserva unas ménsulas [33] avolutadas derramadas en hojas de acanto. Serán restos de un retablo romanista de hacia 1600 del que no ha quedado ningún otro elemento.

El banco marca las calles con nuevas ménsulas de hojarasca muy carnosa, denominador común a toda la ornamentación del mueble. En los extremos, costillas avolutadas. Los paños presentan tableros recercados por grumos vegetales, habiéndose encajado al centro el sagrario [34]: una portezuela con recerco recorrido también por grumos y con orejas arriba. Se decora con relieve no muy bien resuelto de custodia que sigue los modelos de la orfebrería de principios del siglo XVIII.

Ya en el cuerpo [35] los ejes se definen por cuatro columnas compuestas salomónicas de espiras contrapuestas cargadas de pámpanos y uvas. La calle mayor es preponderante sobre las laterales que, por su estrechez, no sirven para albergar figuras. Sobre sus tambanillos aparecen cartelas vegetales.

La casa principal es un medio punto sobre pilastras, con todo el intradós cajeado para florones. Se enmarca en moldura de hojas carnosas que arriba quiebra en orejas para corona y tambanillo vegetal que envuelve el anagrama de la Virgen María.

Las calles laterales sólo muestran tableros rectangulares rehundidos definidos por nuevas series de grumos.

La cornisa, quebrada según las columnas del cuerpo, sostiene al centro el ático [36], que se define por pilastras enmarcadas en unos aletones de espira recogida abajo. Se apeanan en la parte superior para sostener pináculos abalaustrados, elementos que se repiten igualmente en la cornisa sobre los ejes de las columnas. El remate general es una gran tarjeta botánica, recogida hacia adelante a modo de venera para proteger figura del pelícano. La casa no es más que un marco de grumos acodillado para tambanillo.

A pesar de su pequeño tamaño, es obra de interés por la belleza del diseño y lo acertado de las proporciones. Es un retablo de estilo barroco churrigueresco, posiblemente de la primera década del siglo XVIII5ZORROZUA SANTISTEBAN, 1998, p. 302..

En cuanto a la iconografía, la imagen titular, Santa Marina [37] (112) sobre un horrible monstruo, es talla de rostro agraciado, expresivo, vestida con envolventes paños. Pieza barroca de la segunda mitad del siglo XVII, será reaprovechada de un retablo anterior.

En el ático va una Piedad [38] (76 x 43,3), en madera policromada y estofada, con la imagen de Cristo en postura diagonal, descoyuntado, de anatomía muy exagerada, como también lo es la expresión de la Virgen, de rostro triangular, muy sentida, transida de honda tristeza. Obra tardogótica, de hacia 1510-15206MUÑIZ PETRALANDA, 2011, 236., resulta una interesante representación de las piedades del tránsito entre la Baja Edad Media y el Renacimiento.

Encima del retablo –ocupó anteriormente el ático–, pequeño Cristo Crucificado [39]. Madera policromada. Por lo que se aprecia será de mediados del siglo XVIII.

Escultura

 

A la izquierda del retablo, Virgen del Rosario [40] (87 x 35 x 26). Madera policromada en colores rasos. De canon corto, es pieza popular barroca del último cuarto del XVII o quizás algo posterior –del momento del retablo– si pensamos en un artista un tanto retardatario.

Al lado opuesto, San José con el Niño [41] (101 x 51 x 25). Madera policromada. De la misma cronología que la anterior, aunque con tratamiento de los rostros más diestro.

San Antonio de Padua [42] (63 x 22 x 17). Madera tallada y repintada. Pieza barroca popular del XVIII. En el libro que sostiene puede leerse el arranque del Te Deum en castellano y latín.

En la sacristía, Cristo Crucificado [43] (62 x 47,4 x 6; con cruz 90,8 x 56,7 x 8). Madera policromada. Neoclásico, del XIX, aunque de talla bastante popular.

Metalistería

 

Campana de Santa Marina [44] (56 x ø58). Esquilonada. Realizada en 1842 por el campanero de Trasmiera (Cantabria) Mateo de La Hoya II. Lleva inscripción: IHS SANTA MARINA ORA PRO NOBIS AÑO 1842 HOIA ME HIZO7BARRIO LOZA, MOLINUEVO ZABALA y ROMANO VALLEJO, 2005, pp. 40-41..

Campana de San José [45] (58 x ø62). Esquilonada. Realizada en 1889 por el campanero bilbaíno Aguirre Sarasua. Lleva inscripción: SAN JOSE ORA PRO NOBIS 18898Ibid..

En ambos accesos, pernios de las puertas [46] [47]. Hierro. De la época de reconstrucción de la iglesia (1727-1730).

Ornamentos

 

Casulla [48]. Fondo de damasco rojo con vegetales geometrizados, del XVII. La franja central, formada por varios trozos reaprovechados, con vegetales enmarcados en rombos anillados, podría ser del XVI.

Cubrecáliz [49]. Con diseños florales, tejido probablemente francés de mediados del siglo XVIII.

Otros elementos

 

Pila bautismal [50] (86 x ø64). Piedra arenisca. Hemiesférica sobre pie cilíndrico, y en la soldadura entre ambos cuerpos un bocel. Será quizás de principios del siglo XVI.

En la sacristía, sacrarium (aguamanil) [51]. Piedra. Conformado por un depósito poligonal con grifo y bajo él pila con desagüe al exterior. Será coetánea a la actual fábrica, pero reaprovecha como remate lo que parece un alféizar decorado con bolas, de principios del XVI.

En la sacristía, armario-cajonería [52] (118,5 x 100 x 239,5). Madera tallada. Pieza barroca popular que aparece fechada en un lateral [53]: 1730. Las puertas centrales son una reposición más moderna, probablemente del XIX.

Sobre la anterior, pequeño retablo [54] (171 x 147 x 35). Madera marmorizada en marrón y verde. Es una sencilla pantalla rematada en frontón circular.

Elementos de interés etnográfico

 

En la sacristía, atabaka (plato limosnero) [55] (18,5 x 36 x 14). Madera policromada. Pieza muy popular, de doble cazo separado por placa vertical en la que se pintan por un lado una calavera y por el otro las ánimas del Purgatorio [56]. Probablemente de la primera mitad del siglo XIX.

En la sacristía, matraca [57]. Madera. Se utilizaba para llamar a misa en Semana Santa, cuando no podían sonar las campanas.

En la sacristía, dos capillas portátiles [58] [59]. Madera, vidrio y escayola. Con imágenes de la Virgen de Lourdes (?). Tercer cuarto del siglo XX.

En el pórtico, mesa [60]. Piedra. Parece remedar las de las reuniones concejiles, aunque por su formato (de base maciza) recuerda más a un altar lateral que se haya sacado al exterior con motivo de las últimas reformas.

JMGC – RCL

4. AHEB-BEHA, Cuentas de fábrica de la parroquia de Santa Marina de Arakaldo. 1808-1829, sign. 0135/006-00.

ELORRIAGA BUSTAMANTE, 1995, p. 344.

ELORRIAGA BUSTAMANTE, Carlos. Arakaldo y Arrankudiaga-Zollo. Estudio histórico-artístico. Bilbao: Diputación Foral de Bizkaia, 1995. (Colección Monografías de pueblos de Bizkaia).

5. ZORROZUA SANTISTEBAN, 1998, p. 302.

ZORROZUA SANTISTEBAN, Julen. El retablo barroco en Bizkaia. Bilbao: Departamento de Cultura

6. MUÑIZ PETRALANDA, 2011, 236.

MUÑIZ PETRALANDA, Jesús. Reflejos de Flandes. La escultura mueble tardogótica en Bizkaia. Bilbao, Museo Diocesano de Arte Sacro, 2011.

7. BARRIO LOZA, MOLINUEVO ZABALA y ROMANO VALLEJO, 2005, pp. 40-41.

BARRIO LOZA, José Ángel (dir.), MOLINUEVO ZABALLA, María, y ROMANO VALLEJO, María. Campanas de Bizkaia. Bilbao: Departamento de Cultura de la Diputación Foral de Bizkaia, 2005. Colección Inventarios, nº12. Existe versión on line disponible en https://www.bizkaia.eus/Kultura/kanpaiak/index.asp?idioma=CA

8. Ibid.